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Cómo es la escuela en Estados Unidos. Nuestra experiencia

Les comparto nuestra experiencia de como es la escuela pública en Carolina del Norte, Estados Unidos. Seguramente cambie de estado en estado.

Nuestra experiencia fue super positiva. Por tan sólo unos meses los chicos asistieron a primero y tercer grado de la primaria. Cuando llegamos dudamos si enviar a los chicos a la escuela o hacer homeschooling. Pero finalmente decidimos que podría ser una buena experiencia, además de la posibilidad de hacer una inmersión completa en el idioma inglés.

En el corto tiempo que estuvimos estas fueron las experiencias más llamativas:

1- La escuela es gratuita

Parece una obviedad, porque en todos los países existe la educación gratuita. Pero acá realmente lo es. No sólo la asistencia a la escuela, también el transporte, la comida, los libros y hasta los útiles escolares. En nuestra corta estadía no nos pidieron nada. Los chicos iban a la escuela en esos micros amarillos que se ven en las películas, comían la comida del buffet, leían los libros de la biblioteca de la escuela y usaban los útiles comunitarios que la maestra le daba a todos lo niños. Increíble de un país tan poco socialista, ¿no?

 

2- La lectura es importante

La biblioteca de la escuela era un espectáculo. Y estamos hablando de una escuela pública perdida en un pueblito del sur de Estados Unidos. Una sala gigante, con lugares de lectura, atiborrado de libros, super limpio, ordenado y luminoso. Y por supuesto con personal a cargo. Los chicos tenían la obligación de leer un libro por semana. Según su nivel, por supuesto. Pero por ejemplo Madison leía un libro de 5 páginas por semana. Y al final tenía que entregar un informe con nombre del libro, autor y personajes.

3- El estatus migratorio no importa

Cuando fuimos a anotarlos, sin tener ni idea de como se hace, llevamos todos los papeles para demostrar que nuestros hijos estaban con estatus legal, y listos para argumentar cualquier contra que nos dijesen. No hizo falta. Ni bien llegamos a la oficina, nos tomaron los datos y sólo nos pidieron la dirección para ver qué escuela nos tocaba. En el caso de Cata, que estaba en la secundaria también nos pidieron los certificados de estudios (sin estampillas ni nada) para ver que materias tenía y cuales les faltaban. Esto fue en el año 2013, espero que ahora con el nuevo gobierno esto no haya cambiado.

4- Prohibido el contacto físico.

Los chicos tienen prohibido el contacto físico. Y los maestros también. Eso quiere decir que los chicos no pueden golpearse, pero tampoco pueden por ejemplo jugar a la mancha. Extremos.

Otra norma que parecía del servicio militar era el de charlar a la hora de la comida. Los chicos comían todos juntos con sus grados y sobre la mesa había apilados tres vasos: uno rojo, uno amarillo y uno verde. Según que vaso estaba arriba era el nivel de charla que podían tener. Rojo: nadie habla. Amarilla: charlas en volumen bajo. Verde: pueden hablar. Obviamente había un vaso que estaba más tiempo arriba. ¿Adivinan cual?

5- Las armas quedan afuera

Estamos hablando del sur de Estados Unidos, pero lo primero que nos llamó la atención era el pequeño cartel que decía que no se podía entrar a la escuela ni con perros o ni con armas. El mismo cartel estaba en los centros comerciales. Aunque a juzgar por las noticias que se escuchan seguido, esa norma no siempre la cumplen.

Cartel de armas en Carolina del Norte

6- El orden en la llegada

En los días de mucho frio para que no se congelen esperando el bus amarillo mi marido los llevaba en auto en su camino al trabajo. La escuela tenía un estacionamiento gigante, y además una calle interna que tenía un lugar especial frente a la puerta del colegio para detener el auto y que los chicos puedan bajar tranquilos. Los días de lluvia o de nevadas se armaba una fila de 5 a 10 autos y los docentes y personal de servicio del colegio acompañaban a los chicos desde el auto hasta la puerta con unos paraguas.

7- La feria de ciencias

Esto fue un genial acercamiento al método científico. Luego de elegir el tema, o la hipótesis, que debe ser aprobada por el maestro, los chicos deben hacer todos los pasos de su experimento, observación y documentación incluída. En el caso de Lautaro, el tema era ver el estado de diferentes hamburguesas con el paso del tiempo, comparando hamburguesas caseras con hamburguesas de McDonalds, Burger King, Chick-fil-A y otras cadenas. Durante unas semanas Lautaro estuvo sacando fotos diariamente. Y la presentación final de todos los trabajos en el colegio es muy agradable y al mismo tiempo familiar. Una gran experiencia!

 

8- Perdiendo el bus escolar

Y justo el primer día de clase, Madison perdió el bus que la traía de vuelta del colegio, con escasos seis años y sin hablar ingles. No sabemos bien por qué nunca se subió al bus que le tocaba, o cambiaron el bus y ella no entendió… la cuestión es que ella se quedó en el colegio sola. A media tarde me llamaron para que vaya a buscarla. La encontré sintiéndose medio culpable con cara de pollito mojado por haberse perdido el bus.

La despedida

Nuestra experiencia en la escuela pública en Carolina del Norte fue super positiva. El clima era de respeto mutuo, la escuela estuvo siempre abierta para nosotros y los chicos lograron perfeccionar su inglés.